Charlesmagne Palestine Lima 2006

hola, en esta ocasión escribo sobre este artista, cuya presentación en Lima, en el marco de Vibra (gracias !!) auspiciado cultural de Telefónica, ha sido sin mas ni mas, lo mejor que he podido escuchar aquel año.
Su participación causo expectativa en el concurrido publico (para sorpresa mía) que acudió, a la conocida Capilla de la Penitenciaria, establecida dentro del entorno de la Iglesia San Pedro en Lima. Particularmente vi a varias caras conocidas y respetadas, dentro de un "circuito" ruidista experimental limeña, que va creciendo en notoriedad, con actos como aquella presentación de este buen artista norteamericano.
Era tarde (siete y treintayalgo) cuando veo llegar a un señor canoso, vestido estrafalariamente (pantalón naranja y camisa, entre cruce de hawaiana y hippie, por supuesto con su sombrero) yendo raudo al escenario dispuesto para la ocasión (dos pianos). Llegaba hablando en ingles (idioma que no manejo) como disculpándose por la tardanza (el trafico de Lima, a pesar de tomarse dos taxis).Después abrió, ya en el escenario y despues de sus sinceras disculpas, el maletín que trajo consigo y; bueno para mi, ahí ya comenzó el show.
Primero, se vistió, frente a todos, una camisa nueva (quitándose la que llevaba puesta), después,extrajo de dicho maletín, una cantidad de peluches, de diversos tamaños y una serie de mantitas de seda, todo esto sirvió para que pueda hacer su especial ritual, frente a un publico, cada vez mas impaciente de escucharlo (incluso algunos ya se burlaban, de lo que estaba aconteciendo), luego saco una botella de licor, una copa y para terminar, un retablo pequeño, para que después, los acomode (la seda, puesta en el suelo, como pequeñas alfombras, en donde puso encima sus peluches, puestos ordenadamente, de un lugar a otro, alineados por el retablo, cuyo lugar, era el centro de todo este mini santuario) para su ritual, incluso Charlemagne, en ingles, llamo la atención de todos, por el lugar donde estábamos, diciendo que "un lugar tan especial (refiriéndose a la capilla), necesitaba este pequeño altar"; todo esto se situaba al pie del escenario.
Tomo la copa y vertió sobre ella, algo de licor, que fue tomando progresivamente, pero a su vez, con uno de sus dedos, que mojaba con el licor, lo tenia moviéndolo, por toda la parte superior de la copa, por el borde, dándole vueltas y vueltas por el borde, produciendo un sonido inusitado (para algunos que fueron, la palabra fue preparado), mientras él cantaba, como invocando alguna deidad o ritual necesario para dicha velada, "Ahhhhhhhh..." se escuchaba notoriamente en la sala, con la atencion de los asistentes, durante varios minutos, era algo bastante especial y místico, como histórico y espiritual.
Bueno acabado esto, procedió a acercarse a los dos pianos y usando uno de ellos (y después el otro, para continuar) comenzó a tocar, dándole solamente a dos notas, intercalando, pero al pasar el tiempo, le seguía dando con otra velocidad, vehemente pero con clase, tempestivo pero sabido y experimentado, luego otra y otra, aceleraba pero después se calmaba, jugaba con solo dos notas, pero hacia una atmósfera tan impactante como imprescindible (esos pianos tenían algún truco musical o ¿como hacia el artista para darnos semejantes espectros sonoros?), ALUCINANTE !!!
Pasaba al otro piano, (sin antes tomar algo mas de licor, acto que lo hacia de vez en cuando, en los momentos que pasaba de un piano a otro) que me pareció algo mas grave que el primero, y también repitió la misma formula, dos notas, que intercalaba constantemente, con una rapidez cada vez mas sorprendente y enriquecedora, para luego desacelerar, sin perder la constancia debida.Después de un rato, utilizando ambos pianos, una mano en cada uno de ellos, utilizaba la misma acción, en uno, una nota, y en el otro, igual, creando un espectáculo tan drone como total, minimalismo al servicio de la humanidad, en fin Música Selecta.
Contemplación, alucinación, meditación, en fin todo un ambiente sensacional lleno de gestos (la mirada de Charlemagne, tan inquietante como soberbia, etc.) e inquietudes drone, minimales.
Pasaba a tocar solamente un piano, en una sesión de algo mas de quince minutos, donde el miedo, el asombro, la estupefacción quedaron invertidos ahí mismo, con solo dos notas, básicamente. El publico, yacía muchas veces con los ojos cerrados, contemplando a través de los oídos, el controversial sonido.
Acabada la sesión, el artista se para del asiento, canta algunas líricas y da un sonora palmada, que posiblemente hizo despertar al público, desgraciadamente, de aquella atmósfera, bueno inmediatamente la gente le devuelve el gesto con otro fuerte aplauso.
Saludos Carlos